Últimamente, leí que la culpable de las acciones del hombre es su mente, ahí se conciben todas las acciones que se emprenden y que pueden tener consecuencias terribles tanto para si mismo como para los demás, lo relacioné con el complejo mecanismo de coerción imperante en el modelo de gobierno de la mayoría de los sistemas políticos actuales. La mayoría están cimentados en el uso de diversos elementos para generar estabilidad, pero para ello hacen uso de varios aspectos negativos, entre ellos la manipulación mediática, la enseñanza educativa que genera patrones específicos de conducta, que condicionan la línea de pensamiento de las personas, el uso de la violencia legitima del Estado (la PFP es un cuerpo policial formado con ex integrantes del ejercito, gente que al no tener otro tipo de oportunidades, optó por ser parte de las ventajas que implica en la actualidad pertenecer a este poderoso sector, elemento a su vez utilizado para fortalecer su sentimiento de pertenencia), se condiciona desde pequeños a las personas; en sus primeros años de vida la población es bombardeada por manifestaciones publicitarias que lo familiarizan tanto con el consumo como con el orden por el que esa información le es transmitida, el predominio de la radio para la venta de valores, por ejemplo.
El Estado funciona como un ente enorme que se ha acostumbrado a someter a las personas para asegurar su continuidad, la lucha entre violencia y reflexión se genera constantemente, se cree que el orden depende de la existencia de instituciones, un dilema crítico es posible si se considerara la inexistencia de instituciones, porque este tipo de dilemas no se promueven para ser reflexionados. Hemos olvidado las capacidades de nuestra bondad natural, de la que poco se habla, la que poco nos preocupamos por descubrir; antes de ello se exalta la competencia, las aptitudes, el status, se predispone al ser humano para ser defensivo, se le educa para ser dependiente.
Si un hombre tiene la oportunidad de conocer la capacidad que tiene para expandir tanto su criterio como su capacidad de pensar de manera distinta, por medio de la confrontación de la imagen que tiene de si mismo ante una realidad distinta, destruyendo las cosas en las que creía para entonces conocer lo poco cercano que esta de adquirir una verdad total, quizás estaría dispuesto a crear un orden que no estuviera relacionado con la represión, y no necesitaría en absoluto ser vigilado por ninguna institución producto de la complejidad de la mente colectiva para que su comportamiento sea “adecuado”, de hecho, su comportamiento podría basarse simplemente en principios de sentido común y no en principios represivos.
El mismo sistema de interacción ha forjado para si mismo discursos actuales de bienestar, promueve constantemente información respecto a que las cosas están bien. La población que parece más propensa a quedarse con ese discurso y asumirlo como propio, inmediatamente, es el grupo demográfico que comprende a la denominada clase media, la que participa principalmente en los procesos de producción de riqueza, dedicada principalmente a los aspectos técnicos de la administración tanto del sector público como del privado, se dedica a éste aspecto debido al constante y progresivo aumento de la terciarizacion de la economía en lugares densamente poblados. Se ha forjado una relación rutinaria entre ambas partes, la clase media (en la que actualmente quizás esta comprendido el más importante grupo demográfico que es conciente de sus derechos políticos), y por otra parte la superestructura del Estado, individuos convencidos de propagar y asegurar la continuidad de las actuales reglas para participar del poder. La relación se propaga, no se tratan temas sustanciales, no se promueven acciones que tengan una repercusión notable, el sistema se ha consolidado y parece que actualmente el destino de un país se limita a polarizar ante posturas que no son tan divergentes, solo se trata de la continuidad del modelo ,de la continuidad en el mando de un grupo que en realidad no generará cambios realmente benéficos, quizás a lo máximo que pueden aspirar, es a aumentar en un 2.5% el salario mínimo de la nación… Respecto a lo demás, el sistema de coerción continuará siendo el mismo.
Al respecto, la principal alternativa es la de la acción individual y la de los grupos que se organizan para contrarrestar los efectos de lo arriba expuesto… Ningún discurso multitudinario tiene sentido y mucho menos tendrá resultados, si primero no se ha generado un proceso de reflexión personal que destruya la idea generalizada de que todo esta “bien”.
HEBG.
El titulo de la idea, como siempre, hace referencia a una cancion, en este caso una de Yo la tengo... y me parece que aparece en el EP homonimo...
